JUAN CANO
Sábado, 21 de febrero 2009, 02:46
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La policía mantiene abierta una operación contra un grupo antifascista al que acusa de dar una paliza a unos jóvenes, a los que identificaron como cabezas rapadas. Hasta el momento, los investigadores han arrestado a 17 personas, entre ellas dos menores, y no se descartan más detenciones.
Los hechos que se investigan sucedieron el pasado 8 de febrero en la zona acotada para el botellón en el Paseo de los Curas. Según fuentes cercanas al caso, un grupo integrado por cerca de 40 personas supuestamente atacó a cinco jóvenes a los que identificaron como 'skins', algunos procedentes de otras provincias andaluzas.
Las pesquisas apuntan a que los agresores, al parecer vinculados al movimiento antifascista, se citaron por SMS y llamadas a móviles para llevar a cabo el ataque. Según la investigación, supuestamente arremetieron contra los jóvenes y les provocaron lesiones, que en el caso de dos de ellos fueron graves y requirieron tratamiento quirúrgico. Estos heridos sufrieron brechas cuya cura precisó de numerosos puntos de sutura.
También se les atribuyen los daños causados en un taxi en el que los lesionados intentaron refugiarse. Según las fuentes consultadas, los agresores interceptaron el vehículo para evitar que los heridos escaparan, pero desistieron de su idea cuando apareció la policía y emprendieron la huida.
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La investigación, a cargo de la comisaría del distrito Centro, ha llevado esta semana a la detención de 17 jóvenes -la mayoría vecinos de la capital malagueña- por su presunta implicación en los hechos, así como por asociación ilícita. Se les considera pertenecientes a un grupo de ideología Rash, de corte anarquista y antisistema.
Móviles a examen
El instructor del caso ha autorizado a la Policía Nacional a «observar y examinar» los teléfonos móviles de siete de los sospechosos, según explicaron las fuentes.
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Por su parte, jóvenes vinculados al movimiento antifascista acamparon ayer frente a la comisaría para pedir que se libere a los detenidos. «Fue una pelea», aseguraba uno de ellos. «Puede que hayan participado cuatro o cinco, pero la mayoría de los arrestados -sostuvo- ni siquiera estaba allí esa noche.
Fuentes de la defensa de varios de los detenidos insistieron ayer en que la mayoría no tuvo implicación en los hechos, y pidieron que no se criminalice al colectivo y no se les trate como una banda violenta.
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