Bomberos de Estepona ensayan el rescate de personas con perros

El derribo de uno de los edificios de Parque Central como parte del acondicionamiento de la zona para las obras del gran bulevar, sirvió para que el Cuerpo de Bomberos de Estepona pudiera entrenar con algunos de sus miembros. Se trató en esta ocasión de dos perros de agua que forman la unidad canina , y que entrenados por el método Arcón, son capaces de localizar a personas enterradas en cuestión de minutos.

Los escombros formados por el edificio dotaba a los bomberos de un escenario único para ensayar, ya que los perros, al practicar siempre en los mismos sitios, acaban por aprenderse el terreno y su entrenamiento pierde validez.

«Hemos realizado un ejercicio que consiste en localizar a una persona que estaba enterrada en la zona del derrumbe. El perro realizó la búsqueda desde el punto de suelta, de forma totalmente autónoma hasta que encontró a la persona que estaba sepultada. En ese momento, nos alertó a través del ladrido de que se encontraba allí», explicó el sargento de servicio del Cuerpo de Bomberos de Estepona, Javier Luque.

El simulacro comenzó con la localización del lugar idóneo donde enterrar al voluntario. Entonces, se soltó a uno de los perros fuera de la zona de derribo para que empezara a buscar. En los dos casos, tras inspeccionar el terreno, ninguno de los canes tardó más de dos minutos en localizar al miembro del Cuerpo enterrado.

«Aquí en Estepona tenemos dos ejemplares que están oficialmente homologados con las pruebas del método Arcón, y tenemos un ejemplar que lo estamos formando para encontrar personas extraviadas en el medio rural. También hay otros dos perros que están en proceso de formación», explicó Luque.

Al final de cada rescate simulado, se juega con el perro a modo de premio, aunque no en todos los simulacros se hace así. De esta forma, se entrena al can para que a la hora de trabajar en una catástrofe de verdad, esos cinco minutos que dura el entrenamiento pasen a ser horas localizando personas sin que pidan ningún refuerzo afectivo por hombre encontrado.