Vecinos de Estepona afirman que no se les avisó del comienzo de las obras de la gasolinera

Mientras que las obras de la gasolinera que se instalará en Huerta Nueva avanzan a buen ritmo, los vecinos de esta barriada siguen indignados por esta edificación. A tenor de unas palabras del alcalde, José María García Urbano, en el pasado pleno de marzo en las que afirmaba que había notificado a uno de los administradores el comienzo de las obras, los vecinos consiguieron sendos escritos de los administradores de los edificios en los que aseguran no haber recibido ningún aviso.

En estos documentos, a los que tuvo acceso este periódico, tanto la administradora de la fase 1 y la macrocomunidad de los bloques de Doña Erminda, Rosa María Simón, como el de la Urbanización Las Brisas, José Luis del Valle Sepúlveda, certifican que dichas comunidades de propietarios no recibieron notificación alguna por parte del Ayuntamiento sobre el inicio de las obras de esta gasolinera, que empezaron hace ya más de dos semanas.

Administrador

Desde el Consistorio se reafirman en que se le notificó a este último administrador, José Luis del Valle, la situación final de esta gasolinera, asunto que lleva coleando desde 2005 en el que se pactó el cambio del tipo de suelo en este terreno para evitar este tipo de establecimiento, pero que nunca se llegó a hacer. Tras la insistencia de la empresa dueña de la parcela, se reactivó en el último trimestre de 2013.

Desde el PSOE, grupo que pidió explicaciones en el pasado pleno por el inicio de estas obras, creen que García Urbano «debería pedir perdón por seguir humillando y maltratando a estos vecinos», aseguró la dirigente socialista Leticia Teboul.

«La construcción de la gasolinera se lleva a cabo por una decisión personal del alcalde y de su equipo de gobierno del PP y en contra de los informes técnicos, jurídicos y medioambientales que indicaban claramente que el Ayuntamiento debería haber desestimado todas y cada una de las pretensiones de la empresa», manifestó Teboul.

Desde que los vecinos se enteraron en el mes de noviembre de la decisión de Patrimonial Adonara de construir la gasolinera, hicieron dos manifestaciones e incluso forzaron un pleno extraordinario para debatir sobre estas instalaciones. Pese a que con el inicio de estas obras los afectados por esta construcción no tienen pensado volver a salir a la calle a manifestarse, los presidentes de las comunidades estudian si llevar el caso a los juzgados para retrasar la apertura, ya que piensan que al concederse la licencia en 2001, en 2014 podría estar caducada. Pero este paso podría resolverse con la petición de una nueva, por lo que solo serviría para ganar tiempo y buscar otras alternativas.