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MÓNICA PÉREZ mperezg@diariosur.es
Domingo, 16 de febrero 2014, 02:38
U N paseo marítimo de más de 50 kilómetros sin obstáculos para el peatón entre la Cala de Mijas y Estepona. De momento es solo una idea con trazo sobre el papel, pero los Ayuntamientos de Mijas, Marbella y Estepona trabajan ya en proyectos que podrían desembocar en esta idea. De entrada, el principal interés de los responsables locales es poner a punto el litoral de sus respectivos términos municipales, focos de atracción para miles de turistas durante todo el año. Pero el avance de estas iniciativas sitúa en un horizonte más o menos cercano la posibilidad de un único trazado para el paseo.
En esta carrera que este mismo año da el pistoletazo de salida para Mijas y Estepona, Marbella lleva muchos kilómetros realizados y euros invertidos de ventaja. Experiencia en la que ahora se miran sus vecinos a la hora de arrancar sus iniciativas. Seis años, más de 6.000 metros en nuevos tramos y una inversión que supera los 11 millones de euros han hecho que el paseo que recorre el litoral marbellí una ya el puerto de La Bajadilla con la playa de San Pedro Alcántara. Apenas quedan una decena de kilómetros y unos cuantos escollos por salvar para unir los 27 kilómetros de paseo marítimo, pero los ciudadanos de Marbella ya pueden ejercer como peatones, ciclistas o patinadores para recorrer los primeros 17 kilómetros sin encontrar obstáculos insalvables en su camino.
La primera piedra del proyecto de ampliación arrancó con la urbanización del tramo que unía el casco urbano de Marbella con el puerto de La Bajadilla. El paseo de madera que salvó el antiguo pedregal de Ventura del Mar, el puente de 70 metros que unió Marbella con Puerto Banús, o las pasarelas de madera que han salvado los arroyos en Las Chapas son solo algunas de las obras más destacadas de un proyecto que sigue adelante. Fue solo el arranque. A lo realizado hasta el momento se unirá este año 2014 otros nuevos tramos para seguir estirando hacia el este -hasta Río Real- y hacia el oeste, con la prolongación Ventura-Guadaiza. Obras que precisan cerca de cuatro millones de euros para saltar del papel a la arena de la playa.
Poco a poco, lo que antes eran obstáculos insalvables, como las desembocaduras de los ríos, se han ido convirtiendo en nuevos tramos de pasarelas peatonales, puentes de madera o suelos de albero. En el camino, escolleras, arroyos y propiedades privadas que han obligado a trabajar a destajo a los servicios jurídicos, pero además no han sido pocas las gestiones realizadas ante otros organismos como la Agencia Andaluza del Agua o la propia Demarcación de Costas. «El resultado es un cambio de imagen total del paseo marítimo de Marbella», recalca el concejal responsable de Obras, Javier García, quien, no obstante, habla de las dificultades que entraña una actuación como la que desde hace seis años echó a andar el actual equipo de gobierno y que se ha ido sufragando tanto con fondos propios como con ayudas de la Diputación Provincial y, en un mayor porcentaje, con el Plan Qualifica.
Mientras Marbella avanza su sendero litoral hacia la zona Este, en la vecina localidad de Mijas se tienen ya trazados sobre el mapa tres nuevos tramos de paseo marítimo levantados, como en el caso de Marbella, con materiales nobles para respetar el entorno y que conectarán la Cala de Mijas con el límite del término municipal marbellí. De momento, el Consistorio mijeño ha dado luz verde en Junta de Gobierno Local al proyecto para dibujar una vía peatonal paralela a la costa. El sendero litoral planteado en este caso busca unir el núcleo de la Cala con el término municipal de Marbella.
Con el objetivo claro de «preservar en la media de lo posible el encanto natural y paisajístico de la costa de Mijas, el equipo de gobierno de Ángel Nozal ha diseñado una iniciativa valorada en dos millones de euros, que han encontrado acomodo en el Plan de Inversiones Productivas de la Diputación Provincial.
La ejecución se ha diseñado en dos fases. Por un lado, se construirá un sendero entre la Cala de Mijas y el Chiringuito El Juncal, en Riviera del Sol, a lo largo de 3.073 metros; y otro entre la urbanización El Capricho y Calahonda Royale, tramo de 1.334 metros.
El pliego de condiciones en licitación, que establece un periodo de ejecución máximo de seis meses, contempla que más del 55 por ciento del sendero estará construido mediante pasarelas de madera; el 13 por ciento se ha proyectado con hormigón impreso, y el resto, con albero compactado.
Para completar esta actuación de carácter turístico y medioambiental, el Consorcio Qualifica de la Junta de Andalucía se encargará de la redacción del proyecto y la financiación de los 1,5 kilómetros que restan hasta la confluencia con Marbella.
Una docena de senderos
En Estepona, el proyecto es más ambicioso: unir los más de 20 kilómetros de costa a través de 12 senderos peatonales que suman cuatro kilómetros, conectando así zonas de paseo marítimo y del litoral que actualmente se encuentran aisladas. Una iniciativa con la que se persigue además dotar a la ciudad de un nuevo atractivo turístico, ofreciendo nuevos espacios para el paseo hasta ahora intransitables.
De momento el Consistorio tiene sobre la mesa los proyectos de tres de los tramos programados que han sido redactados por técnicos municipales. Se trata de la prolongación del paseo en: La Chimenea-Playa Bella; Cabo Bermejo-Residencial San Jaime, y Mar Azul-Hotel Kempinski.
La iniciativa esteponera tiene ya en cartera cuatro millones de euros. El 70 por ciento corresponde a los fondos obtenidos a través del Plan Qualifica. El 30 por ciento restante es aportación municipal. Por ello, el proyecto deberá coger velocidad y pasar de cero a cien en este mismo año, ejercicio en el que debe estar ejecutada la partida económica concedida. «La idea es tener terminadas las obras en diciembre, por ello lo que hemos planteado es compatibilizar el trabajo de redacción de proyectos, preparación de informes y celebración de mesas de contratación con el inicio de las obras en los tramos que se vayan despejando», defiende la concejala de Urbanismo, Susana Arahuetes.
Al estilo de como se viene trabajando en Marbella, los nuevos tramos de sendero litoral en Estepona alternarán pasarelas peatonales, puentes de madera, albero o pavimento, en función de las características de cada zona sobre la que se tiene previsto actuar. El estirón del paseo marítimo se completará con los tramos: Hacienda Beach-La Chimenea, Punta de la Playa, Kempinski-Laguna Village, Laguna Village-Dominion Beach, Dominion Beach-Bahía del Velerín, Residencial San Jaime-Park Beach, Saladillo, Benamara-Playa Baños, y Alcazaba Beach-Pinillos.
De momento, el avance hacia Marbella (por la zona de Guadalmina) no entra en los planes más inmediatos del proyecto del sendero litoral si bien, como reconoce la edil de Urbanismo de Estepona, «no hay nada imposible». La conexión entre ambos términos municipales exigiría salvar el área de Guadalmina, pero también Isdabe, un entorno con amplia presencia de viviendas edificadas casi a pie de mar. «Se puede hacer. Habría que plantear varias opciones para determinar las adecuadas en cada tramo», afirma Susana Arahuetes.
Como en sus pueblos vecinos, la idea de extender el paseo marítimo de Estepona responde a un interés turístico, pero también medioambiental y de protección de lo ya existente. «El problema que nos encontramos es que muchos de los tramos de paseo que ya están hechos no dan servicio porque no tienen continuidad y se deterioran. La idea es dotarles de esa continuidad y favorecer el paseo peatonal. Con algunos de los nuevos tramos proyectados acabaríamos con situaciones que se dan actualmente como las de tener que coger el coche para pasar de una urbanización a otra, porque de otra forma no es posible», comenta la edil esteponera.
Escolleras, arroyos y pedregales han actuado durante años de barreras naturales haciendo imposible el tránsito de personas a lo largo de tramos de mayor o menor longitud a pie de mar. Ahora, la iniciativa de los ayuntamientos de la costa occidental permitirá salvar muchos de estos obstáculos. La empresa no se antoja fácil. La experiencia de Marbella habla de trámites de muchos meses a la hora de extender el sendero peatonal en según qué tramo. Precisamente la protección del entorno exige un especial cuidado a la hora de actuar, de ahí se que se empleen materiales nobles. Cada litoral con su estética, dando lugar a un paseo heterogéneo que avanza hacia la conexión de tres municipios.
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