Borrar
Las urgencias de Carlos Haya se colapsan con frecuencia por la falta de camas en el hospital. :: SUR
Carlos Haya cambia el protocolo por el insostenible deterioro en las urgencias
MÁLAGA

Carlos Haya cambia el protocolo por el insostenible deterioro en las urgencias

La norma establece que ningún paciente esperará más de 24 horas para ser ingresado en el hospital tenga o no cama asignada

ÁNGEL ESCALERA aescalera@diariosur.es

Viernes, 13 de diciembre 2013, 08:41

La insostenible situación por la que atraviesan las urgencias de Carlos Haya requiere medidas inmediatas que pongan freno al deterioro y eviten escenas de pacientes esperando en camillas hasta que consiguen una cama en una planta o que las demoras para los ingresos se eleven hasta tres días ante la falta de camas libres. Como esos hechos no son puntuales, sino que se repiten con frecuencia, la comisión de dirección asistencial aprobó el pasado 27 de noviembre un procedimiento de actuación ante la presión de ingresos en urgencias y la gestión de las camas.

El punto primero de ese documento interno, al que ha tenido acceso este periódico, señala que la estancia de los pacientes en urgencias esperando ingreso (tengan o no cama asignada) nunca superará las 24 horas desde la entrada a urgencias. Asimismo, se deja claro que no tiene que haber enfermos en camillas aguardando que se les asigne una cama.

El protocolo puntualiza que en caso de que haya pacientes en el área de policlínica (ya sea en camillas o en sillones) pendientes de ingresar en planta, se valorará la existencia de camas libres en el área de observación. Si las hay, esos enfermos serán trasladados a esa parte de las urgencias en tanto que quedan camas libres en la planta en la que deben ser hospitalizados.

Otro elemento que se indica en el documento es determinar si entre los enfermos que tienen que ingresar, pero carecen de una cama asignada, algunos pueden ser trasladados a la Clínica Pascual o al Hospital Civil. A ese respecto, se recuerda que en el Pascual (centro hospitalario con el que la Consejería de Salud mantiene un concierto de colaboración) hay dos o tres plazas diarias para usuarios procedentes de las urgencias. Se trata de pacientes que requieren cuidados mínimos.

Camas en reserva

El procedimiento de actuación que se ha elaborado para hacer frente a la presión de ingresos en las urgencias de Carlos Haya incide, igualmente, en que se compruebe la disponibilidad real de las camas del centro hospitalario, verificando 'in situ' las que están inhabilitadas (fuera de servicio) para, en el caso de que sea necesario, utilizarlas. Así, se pone de ejemplo las camas que hay en reserva en la planta tercera del pabellón A. Otras alternativas son convertir en dobles habitaciones de uso individual y ocupar las camas del área de urología/cirugía maxilofacial (están en el Hospital Civil) que se encuentren libres, con la salvedad de salvaguardar las que estén reservadas para los pacientes operados al día siguiente. También se evaluarán las camas del área de ginecología que queden libres si es preciso asignarlas (sólo a pacientes femeninas). Si sigue habiendo necesidad de camas, una vez puestas en marcha las medidas anteriores, se ocupará el módulo del hospital de día médico (14 camas).

Pacientes de alta

En el apartado de la gestión de camas, una premisa básica es que las altas tienen que materializarse en el turno de mañana. De ese modo, se dice: «En el momento en que el facultativo proceda a dar el alta del paciente, la supervisora de la unidad será la responsable de garantizar que dicha alta se hace efectiva en el turno de mañana, movilizando todos los recursos humanos que intervengan en dicho procedimiento con carácter inmediato: enfermería, auxiliares de enfermería, celadores, administrativos, gestión de ambulancias, limpieza, etcétera, debiendo informar de las posibles incidencias a la jefatura de bloque de hospitalización». El documento añade que «en el caso de que existan altas pendientes de hacerse efectivas en el turno de tarde, estas deberán priorizarse sobre cualquier actividad asistencial ordinaria». Asimismo, para que los enfermos no ocupan camas más días de los necesarios, se agilizarán las pruebas diagnósticas pendientes.

El protocolo pone de manifiesto que es imprescindible que durante el fin de semana se realice pase de planta de forma obligatoria en los casos en que exista facultativo de guardia de presencia física.

La masificación del servicio de urgencias de Carlos Haya es un hecho que se repite de forma cíclica. El último colapso se produjo a finales de noviembre. La saturación hizo que varios pacientes tuviesen que aguardar en observación en camillas por la falta de camas. Además, el tiempo de espera para que fuesen trasladados a planta se elevó hasta las 72 horas. La causa principal es que Carlos Haya tiene un déficit de camas, situación que se agudiza cuando hay un pico asistencial en urgencias, una zona que se ha quedado pequeña y carece de la necesaria intimidad y comodidad para los pacientes. Las instalaciones son antiguas, están desfasadas y no se ajustan a la calidad que debe tener un centro hospitalario del nivel de Carlos Haya.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Carlos Haya cambia el protocolo por el insostenible deterioro en las urgencias