Bioparc amplía sus instalaciones para acoger nuevas especies

Las instalaciones naturales de Bioparc se someten desde hace semanas a un proceso de renovación y ampliación con el objetivo de crear nuevos recintos en los que, a su vez, alberguen nuevas especies animales, que hasta el momento no tienen presencia en Andalucía. Así, el recinto se prepara ya para acoger reptiles procedentes de las islas del Indo-Pacífico, el entorno con mayor biodiversidad del mundo.

Pese a los momentos de crisis que se viven actualmente, desde el parque se está haciendo una importante inversión que ronda los 700.000 euros. La nueva zona, que está prevista se inaugure en primavera, ocupa un espacio del recinto de alrededor de 2.000 metros cuadrados. Como el resto de entornos que existen en el parque, el entorno se construirá bajo el concepto de zoo-inmersión, es decir, una recreación del hábitat natural totalmente adaptado a las especies que en ellas viven.

Además de favorecer el desarrollo de los propios animales, esta apuesta permite a los visitantes contemplar a sus habitantes en el espacio más parecido posible a una estampa natural del África ecuatorial o el Sudeste Asiático. Este atractivo tan especial se logra gracias a una solución de continuidad entre el espacio físico que ocupa el público y en el que habita el animal con el objetivo de transmitir parte de la magia que supone recorrer el bosque y descubrir a todos sus habitantes.

Nuevos habitantes

Una vez culminada esta renovación, el estreno del hábitat en el parque de Fuengirola permitirá convertirlo en el único zoo de Andalucía y el tercero de España, después del de Barcelona y el de Canarias, que aloje a los dragones de Komodo: el lagarto más grande y peligroso del mundo, por su tamaño y su mordedura, que además de veneno, incluye una carga bacteriana mortal.

En la actualidad, conviven más de 130 especies diferentes entre mamíferos, aves y reptiles, que conforman además una población superior a 1.400 animales. Una de las más emblemáticas es el Tigre de Sumatra, incluido en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN (Unión para la Conservación de la Naturaleza). Pero, los visitantes del espacio de ocio ubicado en pleno centro de la ciudad pueden disfrutar también de la presencia de numerosos habitantes procedentes de Madagascar, que conviven con impresionantes mamíferos como el hipopótamo pigmeo o el gorila Costa, además de serpientes y cocodrilos, entre otros.

La que en estos momentos se ejecuta no es la primera reforma que tiene prevista la directiva del parque, que recuerda que la inversión se gestó ya al inicio de la complicada situación económica actual. En total el parque contempla otros dos proyectos más. En estos nuevos casos, se llevarán a cabo en años posteriores, una vez asentado el hábitat que ahora se desarrolla, e incluirán tanto un entorno dedicado al Neotrópico -Antillas, América del Sur, Centroamérica además de partes de México y Estados Unidos-, junto a instalaciones de carácter educativo.

Conservación

En este sentido, cabe destacar que la labor de Bioparc va más allá de educar a los visitantes en materia de biología y zoología. Desde sus inicios, el parque ha apostado por acoger especies cuya reproducción fuese primordial, en favor de desarrollar una destacada labor de conservación animal.

Y es que, la entidad participa en casi una veintena de programas de reproducción que ya han dado importantes resultados como es el caso de los lémures, el orangután de Borneo, hipopótamo pigmeo o el duiker azul. Junto con ello, suman una treintena acogidas al (ESB) European Studbook, es decir, el libro de registro europeo de especies amenazadas.

En favor de las actividades de conservación en los zoos, iniciativa bajo el que también se basa el proyecto de adaptación de espacios ahora en marcha, el recinto de Fuengirola también forma parte de tres programas externos a los establecidos por la (EAZA) European Association of Zoos and Aquaria.