El Ayuntamiento no suspendió el desfile por «motivos de seguridad»

Tras confirmarse el fatídico desenlace, al pie de la fuente de las Tres Gracias, el alcalde, Francisco de la Torre, junto a un nutrido grupo de concejales y el responsable de la seguridad en la cabagalta de la Policía Local, convocó una reunión de urgencia para decidir qué se hacía con el desfile, que apenas llevaba una hora de andadura. Tras escuchar a todas las partes, el equipo de gobierno municipal decidió que la comitiva no se podía suspender por «motivos de seguridad». En cambio, sí se anuló el tramo final del itinerario, consistente en la ofrenda en la escalinata de la Catedral, en la plaza del Obispo.

En la decisión tuvo un peso específico la decisión del padre de la víctima. «Le he preguntado sobre qué hacer con el desfile, pensando en todo el público, en todos los niños, y era de la opinión de seguir con la cabagata, y ello ha ayudado a conformar la decisión, difícil por otra parte porque el propio desarrollo en longitud de la cabalgata no cabe echar marcha atrás, y que pueda tener un desarrollo en lo posible para aquellos que no lo saben», aseguró De la Torre ayer.

El evento mueve a decenas de miles de personas de toda la provincia -incluso se habían fletado numerosos autobuses desde varias localidades- por lo que modificar el recorrido podría haber provocado problemas de orden público y de seguridad. «Hemos barajado la opción de suspenderla pero hemos visto la dificultad que eso supone, dentro de la situación de la ciudad, con muchísimo detalle, y hemos decidido que la decisión menos mala era que siguiera, eliminando la parte última, la ofrenda a los Reyes Magos a los pies de la Catedral», agregó.

La decisión «menos mala»

Las circunstancias de lo sucedido y la decisión municipal posterior suscitaron una intensa polémica en las redes sociales. «Hemos tratado en este tema de tomar la decisión menos mala, si me permite, que muestra solidaridad y cercanía con la familia y al mismo tiempo tratar de que sea viable en el conjunto de la ciudad», justificó De la Torre. En este sentido, fuentes tanto municipales como policiales y de la organización del evento coincidieron en que la suspensión podría haber dado lugar a una grave algarada en el Centro, además de la confusión para los padres y los cientos de niños que iban a bordo de las carrozas.

Sobre la posibilidad de haber acortado el recorrido, el primer edil reconoció que se había estudiado, aunque no se encontró forma de hacerlo: «Hay gente esperando en todas las zonas, y tampoco cabe acelerarlo, porque ello supondría menos seguridad», y añadió: «Ahora nuestro pensamiento está con los padres de este niño, su familia y con su dolor».