Imbroda reconoce que en Melilla hay tendencias religiosas radicales

Juan José Imbroda asegura que Melilla es un ejemplo de convivencia, una ciudad donde no existen palabras como «racismo o xenofobia» a pesar de que últimamente estén haciendo acto de presencia «modas religiosas radicales importadas de Oriente». El presidente reconoce que, aunque no en grandes cantidades, ya hay en Melilla algunos salafistas.

En declaraciones a Radio Nacional de España, Imbroda comentó que la población ha entendido el mensaje del respeto, la paz y la solidaridad. Afirma el presidente que los melillenses son los artífices de que en la ciudad no haya problemas por razones étnicas o religiosas.

De cualquier forma, el Gobierno autonómico es consciente de la necesidad de atender a un amplio sector de la sociedad que no tiene ningún tipo de formación. Imbroda cree que hay que darle a esos melillenses «un horizonte», para que tengan esperanzas en el futuro.

Imbroda insiste en reclamar una mayor atención para Melilla, una ciudad española cuya situación geoestratégica es «más delicada» que la de otras regiones del país. El presidente sostiene que la población requiere «importantes ayudas» para que la convivencia siga siendo pacífica y los melillenses continúen tratándose con respeto.

En todo caso, y al margen de señalar que su Gobierno no puede hacer más por quienes más apoyo necesitan, Juan José Imbroda asegura que Melilla sigue siendo para todo el mundo un modelo de convivencia. El presidente, que reconoce sentirse orgulloso de su ciudad, afirma que su idea de ciudad es cada día «menos un sueño y más una realidad».