

Secciones
Servicios
Destacamos
IGNACIO LILLO ilillo@diariosur.es
Sábado, 26 de noviembre 2011, 17:56
Con diez mil toneladas de derivados petrolíferos se puede poner a andar a miles de coches, camiones, furgonetas y motos. Pues esta es la cantidad de los dos principales combustibles de automoción que los malagueños han dejado de consumir cada mes respecto al año del inicio de la crisis, en 2007. En septiembre, última fecha sobre el que constan datos provincializados, la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores) registraba un consumo en Málaga de 48.402 toneladas de gasóleo A -el producto más demandado en las gasolineras- lo que supone un descenso superior al 5% respecto al mismo periodo de 2010; y del 14% sobre el escenario de hace cuatro años. A su vez, la gasolina de 95 octanos ha descendido por encima del 6% interanual (un 13% de caída acumulada), hasta las 14.735 toneladas.
La incertidumbre económica está haciendo una fuerte mella en las estaciones de servicio de la provincia, que ven descender sus ingresos tanto en surtidores -por las restricciones en el uso del vehículo por parte de las familias- como en los negocios paralelos (tiendas, autolavados, etc). Así lo expone Álvaro Fontes, presidente de la patronal Agavecar, quien observa un descenso incluso más pronunciado en fechas recientes. «Hay un parón importante en el consumo y la economía, llevamos unas últimas semanas malas», comenta. A su juicio, el problema es la sensación general de desconfianza. «La gente está muy temerosa, se escucha que el nuevo Gobierno traerá recortes y subida de impuestos, y ello se manifiesta en una ratio de bajadas de ventas muy importantes», añade. Entre semana la gente tiene que seguir repostando para ir a trabajar, aclara, por lo que la caída se manifiesta en mayor medida en los usos lúdicos, los fines de semana, lo que también se pone de manifiesto con la generalizada reducción del tráfico. Con todo, este experto es optimista y cree que, aunque la crisis se ha agudizado, los recientes cambios políticos pueden ayudar a crear confianza en una mejora de la situación económica.
El gasóleo, más caro
Tampoco se puede obviar el factor disuasorio que supone el progresivo encarecimiento del gasóleo, el producto petrolífero más demandado (el 70% de las ventas en las gasolineras). Según los datos del Ministerio de Industria, en la provincia se cotizaba ayer a un promedio de casi 1,32 euros por litro; por encima del precio de la gasolina de 95 octanos (que ayer marcaba 1,29 euros de media). Como es sabido, a mayor coste acompaña siempre un descenso del consumo.
Junto al menor uso del coche, la crisis está dando lugar también a un cambio en los hábitos de movilidad de los ciudadanos. Ello se manifiesta, por un lado, en el incremento sostenido en el número de viajeros en los medios de transporte público, sobre todo en la Empresa Malagueña de Transporte (EMT). A su vez, se mantienen las ventas de motocicletas y ciclomotores de 125 centímetros cúbicos (que se pueden conducir con el carné de coche y que son cada vez más eficientes). Aunque todavía es testimonial, cada vez es más frecuente ver a ciudadanos circulando en bicicleta, como también constatan las ventas en las tiendas especializadas.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Pillado en la A-1 drogado, con un arma y con más de 39.000 euros
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.