La UMA denuncia a un alumno de Teleco por destrozar una puerta

Nadie encuentra explicación a lo sucedido ni sabe qué pudo pasar por la cabeza de un alumno de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Telecomunicación de Málaga cuando tras acudir al despacho que comparten dos profesoras del centro y comprobar que no había nadie la emprendió a golpes con la puerta, destrozando su cerradura. Los motivos que llevaron a este estudiante hasta esas dependencias se desconocen por el momento, lo que sí es que al ver frustrada su intención, reaccionó con violencia.

El director del centro, Antonio Puerta, reconoce que no es un comportamiento normal; «es un hecho «desafortunado que no debe volver a repetirse». Por eso, fue él mismo quien días más tarde se personó en la Comisaría Provincial de Policía para denunciar lo sucedido.

El secretario general de la Universidad de Málaga, Miguel Porras, confirma este extremo y reitera al igual que Puerta que se trata de un incidente «aislado». Es más, este último cree que denunciando estos hechos se puede evitar que se repitan episodios similares en el futuro.

El pasado 3 de febrero, día en que tuvo lugar el incidente, la Policía Nacional tomó declaración al alumno antes de permitirle que se marchase. Desde entonces no ha vuelto a aparecer por clase, a pesar de que ha sido convocado por la dirección para que dé explicaciones de lo ocurrido.

En principio, no parece que las razones que movieron al alumno a actuar como lo hizo fueran académicas, pues ninguna de las dos profesoras del despacho dañado le dan clase este curso.

El secretario general de la UMA deja constancia de que son muy pocos los expedientes informativos que se abren a estudiantes en un curso académico (dos o tres) y, en la mayoría de los casos, se resuelven en esa fase con la disculpa del alumno.

Explica que en el ámbito académico, es el profesor quien sanciona con las herramientas que tiene a su alcance y quien vela por unas normas mínimas de convivencia.

Caso diferente es cuando se le abre expediente disciplinario al alumno, que se hace cuando se causan daños a personas y/o cosas. «En estas ocasiones, las denuncias siguen su curso en los tribunales, pero si el alumno se retracta, la universidad puede llegar a parar el expediente disciplinario y no se llega a la sanción ni a la expulsión», explica. Tanto es así, que la UMA a día de hoy no ha ejecutado ninguna expulsión. Enlaces relacionados>>Más noticias de la UMA