Hallan los cadáveres de dos británicos en un cortijo en Coín

La Guardia Civil investiga las circunstancias de la muerte de dos hombres de nacionalidad británica, de entre 40 y 50 años, cuyos cadáveres fueron hallados en el interior de su vivienda, situada en el paraje rural de Valdeperales, dentro del término de Coín.

Una patrulla de la Policía Local del municipio encontró anoche los cuerpos sin vida de los dos extranjeros tirados en el suelo, uno de ellos boca arriba y el otro, boca abajo. Según fuentes cercanas al caso, había manchas de sangre en la habitación que dejaban abierta la posibilidad de una muerte violenta.

El hallazgo se produjo después de que el Consulado británico alertase a los agentes municipales de que las familias de las víctimas llevaban mucho tiempo sin poder contactar con ellos.

La búsqueda

No fue tarea fácil. La Policía Local de Coín desplegó un dispositivo de búsqueda por todo el término municipal. Al ver que el rastreo no daba resultado, un agente contactó con la familia para pedirle alguna pista más, y éstos le enviaron un correo electrónico con un gráfico que indicaba el sitio exacto donde estaba la casa.

Una patrulla acudió al lugar, enclavado en un paraje rural próximo al casco urbano de Coín, y al que se accede desde la carretera que conduce a Monda. Había un coche aparcado en el exterior. La puerta estaba entreabierta. Decidieron entrar. En una habitación hallaron los cuerpos sin vida de los dos hombres.

La Policía Local avisó inmediatamente al puesto de la Guardia Civil de Coín, que acordonó el perímetro del cortijo. Al cierre de esta edición, se estaba a la espera de que la autoridad judicial procediese al levantamientos de los cadáveres.

Vivienda de alquiler

De momento, sólo ha trascendido que la vivienda en la que aparecieron los cuerpos -una casa de dos plantas, situada sobre una especie de almacén- había sido alquilada a través de una inmobiliaria, pero se desconoce si los fallecidos vivían juntos. Tampoco ha trascendido cuánto tiempo llevaban residiendo en Coín.

El hallazgo de los dos cadáveres en extrañas circunstancias supone el segundo caso de muerte violenta que se produce esta semana en la comarca del Guadalhorce. El último precedente data del sábado por la noche. Un hombre de nacionalidad rumana fue detenido por la Guardia Civil acusado de apuñalar horas antes a su compañero de piso, al que supuestamente clavó un cuchillo en el pecho.