La Monda Rock, fuerte como nunca

Érase una vez un pequeño pueblo de casas encaladas coronado por un castillo de origen árabe. Allí convivían felizmente todos sus habitantes. Una vez, un grupo de jóvenes del municipio decidió crear una asociación cultural para poder tocar con su grupo en un pequeño festival que ellos mismos organizaron. La Monda Rock fue su nombre. Tras celebrarlo por primera vez, se abrió un extenso paréntesis que la organización justifica en la falta de respaldo público, por lo que nunca más se supo de aquel festival. Hasta el pasado 2012.

Este es el cuento que narra Paco Liñán, presidente de La Monda Asociación Cultural y director de La Monda Rock. Y tiene mucho que ver con la realidad. Ahora, además, aquel castillo se ha convertido en un hotel especializado en intercambios de parejas. Las cosas han variado mucho.

La Monda Rock volvió hace dos años tras su desaparición en el 98, y lo hizo «para quedarse». Según Liñán, esta es su «edición más fuerte», por «la calidad y cantidad» de grupos, y acerc a la cita estival a su principal objetivo: asentarse dentro de la gruesa agenda malagueña de festivales.

La Custom y el bluesman Hot Nasho, O Funk Illo y Tomasito encabezan el cartel de esta nueva edición, que tendrá lugar los próximos 25 y 26 de julio. El sofisticado postrock instrumental de Kermit, el rocksteady de los marbellíes Briatore y el british pop de La Cena completan el cartel, junto con K: Miss & The SoulbelleFree, Journey Tó Jazz Dj, Carlito Brigante, We are not Djs, The Supers Groove, Las Ventanas, Tribal Show y las Hermanas Sister. En definitiva: «Un cartel ecléctico y para todos los públicos», al gusto de los organizadores.

Los requisitos para formar parte del evento, según Liñán, son dos: «Ser un grupo de la zona (exceptuando a los cabezas de cartel) y poseer material discográfico editado», lo cual otorga «nivel» al festival. Pero su historia no es precisamente cómica. En su primera edición tocaron Causas Sociales, Los Cardos, Los Talones y los míticos Tabletom. Grupos de la época que seguían la misma onda sonora. «Curiosamente, La Cena reúne a integrantes de Los Cardos y de Causas Sociales, y otros de Los Talones vuelven ahora con Briatore», señala Liñán.

El regreso

Con la vuelta al gobierno local de Izquierda Unida, como sucedía en la primera época de la cita, fluye de nuevo el presupuesto, unos 18.000 euros, según afirma Liñán. Esta cantidad equivale al 30 o al 40 % del presupuesto. Lo demás procede «del dinero de las entradas (8 euros anticipadas y 10 en taquilla) y de la barra».

El escenario de La Monda Rock se encuentra en el llano del mercadillo, pero tanto el Bar Luna, como el Aki Mismo acogen la fiesta de bienvenida con los conciertos de The Supers Grooves y de Las Ventanas y Tribal Show, respectivamente. El domingo, a modo de adiós, habrá una barbacoa en la Bodega La Plazoleta al ritmo de las Hermanas Sister.

Por ahora no hay actividades paralelas en el municipio con motivo del festival, pero el director asegura que es «una idea para el futuro». Eso sí, recomienda «pasear y tapear por Monda».

La Monda Rock ha ido creciendo progresivamente en estos cuatro años. En 2012, acudieron 400 personas, en 2013, 600, y ahora esperan hasta el doble. Y que el apellido no engañe: el festival une soul, funk, flamenco, rocksteady, jazz y electrónica. Con esta apuesta, Monda quiere hacerse un hueco, ahora que Málaga parece ser la capital sureña de los festivales por excelencia. No quieren un final, ni siquiera feliz. Así que, colorín, colorado, este cuento sólo acaba de empezar.