"Hemos dormido dos horas, pero no podíamos arriesgarnos a no hacer el examen"

Cansados pero satisfechos. Los opositores que ayer se vieron afectados por el caos de Vueling en el aeropuerto han llegado a Barcelona, donde hoy debían examinarse, sin problemas. El grupo que decidió viajar en taxi llegó a las 5.30 tras un viaje de cerca de diez horas. Hemos dormido sólo dos horas, pero no podíamos arriesgarnos a no hacer el examen, reseñaban esta mañana. El viaje compartido entre ocho personas les ha costado más de 1.000 euros y les ha permitido llegar a la Ciudad Condal antes de las 9 horas, que era cuando estaban citados. Sólo hemos hecho una parada para descansar un poco porque lo que queríamos era llegar cuanto antes.

También han podido llegar las personas que decidieron esperar para ver si finalmente salía el vuelo programado pasada la medianoche. Ellos llegaron a Barcelona pasadas las 2.30 horas, aunque también tuvieron que esperar dentro del avión durante demasiado tiempo antes de poder pisar tierra firme. Al parecer no encontraban una escalerilla y nos han tenido cerca de una hora dentro, resumía otro de los viajeros. Imagina los momentos de tensión e histeria que se han vivido después de todo lo que llevábamos sufrido.

El origen del problema de estos opositores se debió a un nuevo retraso de un vuelo de la compañía Vueling que debía llevar hasta Barcelona a un centenar de personas que hoy opositaban a diferentes plazas de tramitación judicial (ayuda a jueces y secretarios judiciales). El vuelo debía haber salido a las 18 horas pero la compañía retrasó el vuelo por motivos operacionales. Ante el temor de finalmente quedarse en tierra, algunos de ellos decidieron viajar en taxi, mientras que otros optaron por realizar conexiones a través de Madrid o Sevilla.