

Secciones
Servicios
Destacamos
Montse Martín
Viernes, 3 de julio 2015, 00:38
Un jurado popular se encargará de juzgar a Miguel Ángel G. G., por el presunto asesinato de su expareja y el hijo de ambos, de cinco años, en septiembre de 2013 en el barrio de La Luz. La fiscal le imputa, de momento, ocho delitos: dos de asesinato, tres de lesiones, uno de atentado, uno de coacciones y otro de maltrato habitual.
No obstante las imputaciones delictivas podría aumentar, como consecuencia de las diligencias solicitadas por el ministerio público y que quedan por practicar, según explicaron fuentes judiciales.
En la vistilla previa al cierre de la instrucción judicial del caso, que lleva el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Málaga y que se celebró ayer, las partes concretaron los hechos y las imputaciones y solicitaron a práctica de las últimas pruebas.
Según las fuentes, la fiscal atribuye al procesado Miguel Ángel G. G. un total de ocho delitos. Además de los asesinato de su expareja y de su hijo, le imputa un delito de lesiones cometido presuntamente en la persona de su suegro, al que golpeó cuando le descubrió en la vivienda con los fallecidos; dos del delitos más de lesiones y otro de atentado a los agentes que intentaron arrestarle y uno de coacciones y maltrato habitual anteriores al asesinato de su expareja. También le atribuye una falta de lesiones cometida, presuntamente, en la persona de su suegra.
La defensa del acusado, por su parte, mostró su disconformidad con las imputaciones de la acusación pública y pidió un nuevo informe psiquiátrico de Miguel Ángel G. G. y su relación con el consumo de drogas. Asimismo solicitó a la jueza que realice un examen a cerca de su bloqueo a la hora de hablar sobre la muerte del pequeño Aarón.
Sabía lo que hacía
Las exámenes practicados hasta la fecha por los especialistas concluyen que Miguel Ángel G. G. no padece ninguna enfermedad mental y ni alteración de sus capacidades intelectivas y volitivas, es decir, sabía lo que hacía, por lo que es imputable penalmente.
El pasado 12 de junio la jueza del Juzgado número 3 de Violencia sobre la Mujer prorrogó dos años más la prisión provisional para Miguel Ángel G. G. En aquella comparecencia judicial, al igual que ocurrió en la vistilla celebrada ayer, el imputado se negó a declarar, aunque se quejó del trato que recibía en prisión, por lo que reclamó ser tratado por un psiquiatra.
En su declaración ante la policía tras ser detenido, Miguel Ángel G. G. confesó que había matado a su mujer Estefanía T. V., de 26 años, de la que llevaba dos meses separado, y a su hijo Aarón, de cinco, aunque en su declaración posterior ante la jueza dijo que no sabía lo que había sucedido con su hijo. Fue el padre de ésta el que encontró los cuerpos sin vida de la mujer y de su hijo en la vivienda, donde estaba también el procesado, quien huyó en un vehículo, aunque fue arrestado por la Policía Local poco más tarde en la autovía.
Las autopsias concluyeron que la muerte de ambos fue por asfixia, aunque la mujer presentaba también una herida de arma blanca en la cabeza.
Los dramáticos hechos causaron una gran indignación en el barrio de La Luz donde vecinos y familiares se manifestaron para pedir Justicia.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.