El buen tiempo se alía con la Semana Santa y favorece una gran afluencia de visitantes

El sol y las altas temperaturas se han aliado en este inicio de la primavera con la Semana Santa en Málaga, tanto que ha llevado a muchos malagueños y visitantes a las playas como si se tratara de pleno verano. De hecho, el Domingo de Ramos se llegaron a registrar 31 grados centígrados, y el Lunes Santo 28. En el aeropuerto de Málaga, el primer día de procesiones se batía el récord de temperatura mínima más alta, 20,1 grados centígrados cuando la mínima anterior para un mes de marzo era 19,4 grados centígrados en marzo de 1987. Las altas temperaturas y el sol han sido consecuencia del anticiclón que ha estado instalado sobre la Península durante la Semana Santa.

El buen tiempo ha sido clave para el sector turístico en la provincia.Los hoteles de Málaga han llenado el 98% de las camas y en la Costa se ha rozado el 80% de ocupación, datos que el sector interpreta como el termómetro de lo que será el verano.

Sin embargo, será acabar con las procesiones y dar comienzo a una nueva semana que nada tendrá que ver con lo vivido estos días.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) preveía ya ayer la entrada de aire frío de componente norte que producirá un marcado descenso de las temperaturas en la mitad norte y zona centro de la Península. En Málaga ese descenso se empezará a notar sobre todo a partir de mañana lunes. Las previsiones anuncian un incremento de la nubosidad desde las 18 horas de hoy domingo que avanzará a muy nuboso durante la madrugada del lunes con probabilidad de lluvia de hasta el 65% a lo largo de toda la jornada. Las temperaturas altas descenderán unos seis grados entre hoy domingo y el lunes en la provincia. Las altas bajarán de 23 a 17, y las bajas no superarán los 11º.