Miley Cyrus, colocada de drogas, se tatúa a su perro Floyd tras un desfase de noche

Miley Cyrus vuelve a las andadas. Una noche de fiesta loca ha vuelto a ser noticia por los excesos que Miley Cyrus, junto a sus amigos cometieron. Con esta velada de desfase más en su curriculum, es normal que cada día que pasa padres de todo el mundo vean a Miley Cyrus como un ejemplo muy negativo para sus hijos. Y es que la última fiesta de Miley Cyrus dio para mucho.

Miley Cyrus (que en su concierto de Madrid enseñó más de la cuenta) salió de fiesta con sus amigos y no solo el alcohol les acompañó durante la 'marchuqui', sino que el alcohol tampoco falló a la cita, como tampoco se la quiso perder la marihuana que los asistentes, incluida Miley Cyrus, consumieron, según publica el Daily Mail.

Tan colocados iban que Miley Cyrus, que dijo que se había hecho el tattoo con el consentimiento de su mascota, y compañía terminaron en un centro de tatuajes y todos terminaron con Floyd, el perro de Miley Cyrus que murió en abril, pintado en tinta. Un tatuaje en el que se aprecia al famoso husky junto a la frase With a little help from my fwends (con una pequeña ayuda de mis amigos) en el costado. Con la obra de arte terminada, Miley Cyrus y sus amigos posaron para la posteridad y colgaron la instantánea en Instagram.