Ejecutan el desahucio de una familia en Cártama

La Guardia Civil ha desalojado definitivamente a Francisco Manuel Ramírez, más conocido como Kiko, y a su familia de su vivienda en Cártama. Durante el desahucio se han vivido momentos de gran tensión, ya que los agentes de la autoridad han tenido que despejar a la fuerza la puerta de la vivienda, en donde se encontraban miembros de la plataforma del 15-M.

A las 10.00 horas, unos 10 vehículos de la Guardia Civil llegaban a la calle Alemania, donde vive Francisco, e intentaban acceder a la casa ante la oposición de vecinos y miembros de las plataformas del 15-M y de Afectados por la Hipoteca de Málaga. Un poco más tarde, hacía acto de presencia la comisión judicial y un cerrajero intentó abrir la puerta. Finalmente la puerta se abrió a golpes ante la imposibilidad de romper la cerradura.

La familia de Kiko se ha mostrado muy nerviosa tras la actuación de los agentes. Una vez en la calle han asegurado que no saben lo que van a hacer al quedarse sin vivienda y han comentado que intentarán irse con algún familiar. Igualmente han denunciado que casi todas sus pertenencias se han quedado dentro de la vivienda, ya que pensaban que no se iba a ejecutar el desahucio.

Tercer intento

La semana pasada se aplazó el desalojo que estaba previsto para el jueves, aunque al afectado no llegaron a notificárselo. Un hecho que el Defensor del Ciudadano de Málaga, Francisco Gutiérrez, criticó. "Cuando una persona tiene una notificación judicial de un desahucio la tensión nerviosa y la preocupación son máximas porque no sabe qué va a pasar, por lo que al menos hay que cumplir las normas y si se va a aplazar, hay que comunicárselo", criticó Gutiérrez.

Ayer mismo, Kiko recibía el tercer aviso de desahucio, sin apenas tiempo para la reacción. Su actitud sigue siendo la misma: no piensa abandonar su casa. Francisco Manuel, casado y con tres hijos, se quedó parado hace unos años y ha conseguido un trabajo como barrendero a media jornada en el Ayuntamiento de Cártama que sirve como ayuda, pero no le da para pagar el dinero que debe al banco, en total, 135.000 euros.