Un centenar de togas para el 'caso Malaya', un juicio sin precedentes

La celebración de un juicio de las dimensiones de "Malaya" lleva aparejada también cuestiones de intendencia y logística de suma importancia. Detalles en los que pocos repararían tienen en este macroproceso un singular protagonismo. Por ejemplo, las togas de los letrados, prendas indispensables para que puedan participar en la vista.

El Colegio de Abogados pondrá a disposición de los profesionales que van a intervenir en "Malaya" un total de 100 togas, que se unirán a las que habitualmente se suministran en la Ciudad de la Justicia. Además el tribunal, que preside el magistrado José Godino, en su afán de que el juicio transcurra lo más ágilmente posible y de que no haya motivos para provocar suspensiones se propone entregar a los abogados que lo soliciten CDs con las declaraciones de los acusados y testigos en los que estén interesados y en las que no hayan participado conforme vaya transcurriendo las sesiones de la vista.

Precisamente la cuestión informática ha supuesto toda una innovación en la organización de este macroproceso judicial, en el que, por primera vez, se ha entregado en soporte informático a las partes los 200.000 folios recogidos en los 196 tomos de la pieza principal, así como de un CD con unos 30.000 documentos y se ha utilizado el correo electrónico para las notificaciones.