La calle como escenario

La climatología veraniega y la llegada de visitantes favorecen la presencia en el Centro de la ciudad de los artistas callejeros que intentan ganarse la vida con su particular espectáculo. Violinistas, cantantes, estatuas humanas, payasos y mimos se dan cita en los más diversos lugares del casco antiguo para amenizar el paseo y las compras a los transeúntes.

Su presencia se detecta en ocasiones fácilmente, por la formación de grupos de personas que se arremolinan para contemplar de cerca la habilidad del personaje en cuestión. Es lo mejor que puede sucederle a una de estas personas, concitar el interés de decenas de viandantes a los que se van sumando cada vez más por la curiosidad.

Estos artistas dedican más de diez horas diarias a su peculiar profesión, toda una larga jornada en la que ofrecen espectáculos de lo más variado. El calor no supone un problema para ellos, ya que en algunos casos lo hacen por afición o bien por sacar algo de dinero con el que vivir el día a día.

Procedencia

Son de orígenes y características tan diversas como las expresiones artísticas que practican en la calle. Provienen de Estados Unidos, Alemania, Ucrania e incluso se puede encontrar a algún malagueño entre ellos. Este periódico ha hablado con algunos de ellos para que cuenten su experiencia.