El Aldemar no encuentra apoyos y venderá su plaza en División de Honor B

El futuro del Aldemar tiene un color gris muy oscuro. Ya ni siquiera parece seguro el apoyo de Hexa, empresa que ha estado ligada al club desde sus comienzos hasta llegar a la categoría de plata del balonmano nacional en un tiempo récord. De momento, se da prácticamente por decidida la opción de vender la plaza y, a partir de ahí, se verá si se puede seguir en Primera... o simplemente si se puede seguir.

La directiva que preside Rafael Martínez no encuentra apoyos. Es más, se podía decir que cada reunión que mantiene para tratar de encontrar esa ayuda supone un paso atrás. La última fue esta semana con el Ayuntamiento de la capital, en concreto con el concejal Elías Bendodo y López Nieto. De allí, en vez de apoyo, lo que se llevó es la notificación de que la subvención que disfrutan como primer representante de la ciudad se verá drásticamente reducida. Es decir, de los 40.000 euros que han recibido este año -antes eran 60.000-, pasarán a 12.000 si están en División de Honor, y 6.000 si lo hacen en Primera. Además, Martínez se ha llevado la idea de que este deporte simplemente no interesa al consistorio, donde le han contestado que «el balonmano no vende».

Mantener el club

Martínez asegura que en estos momentos para él lo de menos ya es la categoría en la que puedan jugar, y que lo más importante es que se puedan mantener el club como una opción para la práctica del balonmano. El presidente del Aldemar asegura que no pretende que el Ayuntamiento le pague el club, ni que le busque un patrocinador que dé 200.000 euros, pero asegura que no debe ser complicado encontrar diez empresas que aporten cada una 20.000 euros. El presupuesto que manejaría el club sería de unos 300.000 euros para los tres equipos que componen la entidad.

La venta de la plaza apenas daría para ganar lo adeudado a los jugadores de la campaña que ha finalizado, esperando completar los gastos generados con el dinero de las subvenciones que aún no han llegado.