La grúa no da tregua a los conductores en el Centro

Si usted es de los que dejan «sólo dos minutos» el coche mal aparcado no tiente la suerte en Compositor Lehmberg Ruiz, Cortina del Muelle y la avenida de Europa porque son -por ese orden- las calles de Málaga dónde más actúa la grúa municipal. En la primera, además por la cercanía de uno de los depósitos -en el aparcamiento subterráneo de la plaza de San Juan de la Cruz-, es vista y no vista la actuación de los operarios.

«Pues pocos coches se lleva la grúa en la calle Compositor Lehmberg Ruiz», refunfuña un taxista, harto de sortear casi a diario la doble fila de coches. Pero esta no es la única infracción susceptible de actuación de la grúa municipal. En la plazoletita que hay junto a las dos sedes de Unicaja, existe una zona reservada a la carga y descarga. Allí caen cada día como mosquitos decenas de conductores. Hay otra zona para los vehículos de transporte en la propia calle Compositor Lehmberg Ruiz, a un puñado de metros de donde se encuentra uno de los depósitos donde son llevados los coches mal aparcados. Por la bocana de este aparcamiento público aparece la grúa y con una destreza encomiable, el operario emplea escasos minutos en enganchar un coche y volver a bajar por la rampa de acceso al aparcamiento de San Juan de la Cruz. Quizás no tarde ni «los dos minutos» que se dan de margen los conductores infractores para sacar dinero de un cajero próximo o recoger un paquete en un establecimiento de la propia calle.

Otros de los lugares prohibidos en Compositor Lehmberg Ruiz son las plazas oficiales reservadas a las oficinas consulares y a la Tesorería de la Seguridad Social que se hallan en la vía. Hay conductores que hacen caso omiso a la señal vertical y dejan sus vehículos en esa zonas sin estar autorizados para ello.

En este 'ranking' negro del ámbito de actuación de la grúa aparece en segundo lugar Cortina del Muelle, fundamentalmente el tramo comprendido entre el hotel Málaga Palacio y la otra esquina, donde estaba Inmobiliaria Osuna. En esa acera hay reservas de plaza para que puedan parar los clientes del hotel a dejar sus equipajes y para un consulado. El resto es para carga y descarga.

Ingenuidad al volante

Ahí está la trampa para muchos ingenuos conductores. Pasadas las ocho de la tarde, creen que ya ha superado la hora reservada para los camiones y furgonetas, y aparcan confiadamente sus coches, casi siempre guiados por las indicaciones de los 'gorrillas' ilegales, que aparecen de forma espontánea. Sin embargo, en la señal vertical figura el horario de la carga y descarga, que se extiende hasta por la noche.

No obstante, también hay infractores que dejan alegremente sus coches durante el día, sin mostrar la más mínima preocupación hasta que se percatan a la vuelta de que le han retirado el vehículo. Para recuperarlo deben dirigirse a uno de los dos depósitos y pagar 62,70 euros por el 'servicio' de la grúa, más 10.90 euros de estancia. Es decir, 73,60 euros. Un pico. Aparte, claro, está la multa, que llegará por vía ordinaria a su domicilio.

La tercera vía donde más se mueve la grúa está fuera del centro histórico. Hay que irse al Distrito de Carretera de Cádiz, a la avenida de Europa, una zona densamente poblada donde abunda la doble fila.

Y en cuarto lugar, en este 'ranking' de calles marcadas por la constante presencia de la grúa municipal, se encuentra el paseo de los Curas. Quizás muchas personas se sorprendan de que esta vía sea la cuarta más castigada por la grúa, ya que la doble fila es inexistente, no hay carga y descarga, ni zonas de reserva oficial. Pero hay una señal vertical de prohibición en determinados días y horas a causa del 'botellón'.

Es sabido que el Ayuntamiento habilitó el paseo de los Curas como 'botellómetro' y cuando llegan las noches del fin de semana, la grúa retira todos los vehículos que continúan aparcados para dejar la zona expedita. Muchos conductores no se percatan de este hecho y cuando regresan al lugar se encuentran con dos mil jóvenes bebiendo y sin el coche de su propiedad.

Solares en El Perchel

En quinto lugar figura la plaza de la Merced, seguida de la calle Cerrojo, detrás de Santo Domingo, en pleno barrio de El Perchel. En esta última han existido hasta hace poco varios solares terrizos que se confundían con las aceras. Los 'gorrillas' ilegales han hecho aquí su agosto animando a los conductores a estacionar en estas parcelas. Una vez cobrada «la voluntad», que se cifraba en un euro, el aparcacoches se quitaba de enmedio y la grúa se llevaba el vehículo.

El policía local dejaba en la acera una pegatina roja en forma de trángulo para informar al propietario de la retirada del vehículo, pero no permanecía más de cinco minutos porque el 'gorrilla' volvía al lugar, quitaba la pegatina y empezaba a hacer indicaciones a los conductores para que aparcaran en el solar. De ahí que se jutifique que una pequeña calle situada junto a Cerrojo, Fuentecilla, ocupe el puesto 19 en la lista de vías donde más actúa la grúa. Desde hace poco tiempo, al estar algunos de estos solares en construcción, le han fastidiado el negocio a los 'gorrillas'.