Herido grave tras ceder bajo sus pies un tramo del Caminito del Rey

Nicolás Rando se encontró el domingo ante una de las situaciones más difíciles de su trayectoria profesional. El guardia civil del Equipo de Rescate Especializado de Intervención en Montaña (Ereim) participó junto a otros compañeros en el salvamento de un joven de 24 años que se precipitó al vacío tras ceder bajo sus pies un tramo del Caminito del Rey, situado en el Desfiladero de los Gaitanes (entre Álora y Ardales). Cayó al agua del barranco desde una altura de 80 metros cuando regresaba junto a otras cuatro personas de Humilladero y Fuente de Piedra de realizar prácticas de espeleología. El grupo se aventuró y cruzó la pasarela peatonal tanto a la ida como a la vuelta pese a que desde hace varios años está prohibido pasar sobre ella por su elevado estado de deterioro.

El golpe dejó a F. J. C. R. herido de gravedad, aunque no llegó a perder la conciencia. Uno de sus compañeros descendió los 80 metros de altura y lo sacó del agua para colocarlo sobre una roca a la espera de que llegase el equipo de rescate.

En el Ereim, con sede en Álora, recibieron el avisto a las 19.00 horas y se pusieron camino del Desfiladero avisando previamente al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para que los trenes de cercanías aminorasen la velocidad, ya que tenían que atravesar a pie los túneles para acortar distancias. Una vez allí, se percataron de la gravedad del joven, por lo que pidieron al Ereim una camilla y llamaron a un helicóptero del Grupo de Rescate y Emergencias de Andalucía (Grea). Otros dos agentes del Ereim llegaron junto a tres miembros de Protección Civil de Álora y bajaron al barranco por cuerdas con la camilla, como ya hicieron sus compañeros. El rescate concluyó a las 21.30 h. cuando el helicóptero trasladó al herido al Hospital Clínico de Málaga, tras una difícil operación para elevar con una grúa la camilla. El joven, con fracturas en las piernas y contusiones, evoluciona favorablemente.