Quinientas personas apoyan a Utrera en un homenaje

«Una cena de amistad». Así definió el malagueño José Utrera Molina, ex ministro de Franco, el homenaje que familiares y amigos le rindieron anoche en un hotel de la capital. Un acto íntimo, si no fuera porque asistieron unas 500 personas, entre ellas su esposa, su ocho hijos y 18 nietos, su yerno -el alcalde de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón- y su gran amigo, el poeta y articulista Manuel Alcántara. También acudieron al homenaje otras personalidades como el arquitecto Salvador Moreno Peralta y el ex regidor Cayetano Utrera. El alcalde, Francisco de la Torre, envió una carta en la que agradecía el compromiso con la ciudad de Utrera Molina, que fue desposeído por parte de la Diputación de los títulos de Hijo Predilecto y Medalla de la provincia que recibió en 1975.

El que fuera durante los años 1974-75 el tercer hombre en el escalafón de mando de España tras Franco y Arias Navarro no pudo ocultar su emoción al comprobar el éxito de la convocatoria, sólo ensombrecida por la concentración convocada a las puertas del hotel por una veintena de miembros de la Coordinadora Antifascista.

Humilde, confesó que no le gustan los homenajes, «porque no soy digno de ellos». Aún así, dijo sentirse muy orgulloso de contar con tantos amigos a sus 82 años y de celebrar esta reunión en Málaga, ciudad a la que se siente muy unido, pese a que hace unos meses le retiraran la medalla de la provincia.

Alcántara destacó de él que es «una persona ejemplar del que he aprendido la asignatura de la conducta». Tras la cena, Utrera Molina, además de una figura de El Quijote, recibió una placa de plata con una artículo de Alcántara publicado en SUR que finalizaba así: «Pepe, te podrán quitar los honores, pero nunca el honor».