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EMOCIONADA. La duquesa de Alba, tras descubrir su estrella en el bulevar de la Fama de Puerto Banús. / JOSELE-LANZA
Una estrella para la duquesa
VIVIR VERANO. GENTE

Una estrella para la duquesa

Cayetana Fitz-James recibe un cálido homenaje en Marbella y se suma a la galería de ilustres presentes en el bulevar de la Fama

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Viernes, 8 de agosto 2008, 10:13

Es una vecina más pero no una vecina cualquiera. La duquesa de Alba escoge año tras año, verano tras verano, Marbella como uno de los destinos inalterables para sus vacaciones, muchas en familia. Décadas en las que Cayetana Fitz-James Stuart, grande de España, apuesta por la Milla de Oro como escenario de sus ratos de asueto y de las tertulias entre amigos en su chalé Las Cañas, en las inmediaciones del hotel Marbella Club. Una embajadora de lujo -otra más- con la que había una deuda pendiente.

Ayer se saldó con creces. El Ayuntamiento, el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) y la Asociación Profesional Española de Informadores de Radio y Televisión (APEI-PRTV) homenajearon a la duquesa con el descubrimiento de una estrella en la galería de ilustres que ya tienen un hueco en el bulevar de la Fama de Puerto Banús. Con ella, la familia crece hasta los 33 nombres propios distinguidos por su vinculación o aportación a la ciudad.

Cayetana no faltó a la cita, pese a los rumores sobre su salud. Emocionada y rodeada de su hijo Fernando y de sus grandes amigos Curro Romero y Carmen Tello, que la ayudó en todo momento a desplazarse y a sentarse en una silla habilitada en la avenida, incluso destapó ella misma la placa como una niña con zapatos nuevos. «Vengo a esta ciudad desde que tenía 15 años y son muchos, porque tengo muchos», bromeó la duquesa de Alba.

No escatimó en elogios hacia la ciudad, de la que destacó su belleza y su buen gusto. «Tengo unos recuerdos estupendos y maravillosos», compartió. Recibió un ramo de flores, una placa con su estrella -que se suma a una interminable lista de homenajes y de títulos nobiliarios- y el cariño de decenas de personas. «Me ha hecho mucha ilusión», confesaba poco después con más tranquilidad.

«Me encuentro bien»

Sin pelos en la lengua, habló hasta sobre su salud. Quiso quitar hierro al asunto entre especulaciones que arrecian. «Me encuentro bien», afirmó. También sobre hijos. Sin rodeos, reconoció que confía en que Cayetano retome su relación con su mujer, Genoveva. «Espero que no se vuelva a enamorar; que vuelva con la que tiene», dijo. Contenta pero algo cansada, fue además fiel a un estilo afianzado con el paso de los años. Atuendo hippie, bolso de croché y abalorios hasta en el tobillo. Lejos de la rigidez que se presupone a la nobleza.

Tanto la alcaldesa, Ángeles Muñoz, como el presidente del CIT, Miguel Gómez, y el presidente de la APEI-PRTV, Constantino Mediavilla, glosaron la estrecha vinculación de Cayetana Fitz-James con Marbella, en la que pasa largas temporadas. Junto a ellos, el escritor Antonio Burgos y el presidente del PP de Andalucía, Javier Arenas, también quisieron arropar a la duquesa. Como una joven y su perra, de nombre 'María Callas'. «La he traído porque quiero que sea la novia de 'Flasito', el perro de la duquesa», bromeó. Y quién sabe...

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