Vecinos de Lagos y Mezquitilla exigen la protección de sus casas

La estabilización de la playa con espigones o escolleras. Esta es la principal reivindicación del medio centenar de propietarios de las viviendas ubicadas en primera línea de playa en Lagos, Mezquitilla y la zona de San Daniel, junto al río Güí.

Y es que los vecinos se han mostrado indignados ante el estudio realizado por una consultora para el Ministerio de Medio Ambiente que pone en tela de juicio la legalidad de sus viviendas. De esta forma, el documento afirma que sus casas están invadiendo el dominio marítimo terrestre, por lo que plantea la necesidad de derribarlas y reubicar a los propietarios en urbanizaciones cercanas.

La asociación de vecinos Bajamar, formada por las 200 personas afectadas, defiende la legalidad de las casas que fueron construidas conforme a derecho y tienen escrituras, por lo que no están dispuestos a perder sus casas.

Tipología tradicional

«Conservan y mantienen una tipología tradicional y constituyen los últimos vestigios de aquellas casitas blancas», afirma el presidente del colectivo, Miguel Ángel Sánchez.

Asimismo, considera culpable de la situación a la falta de preservación de la costa, principalmente a raíz de la construcción del puerto de Caleta de Vélez. «Hace unos 30 años en Lagos había unos 100 metros de playa y ahora tenemos 20 metros como máximo», apunta Sánchez.

Acuerdo plenario

La asociación va a iniciar una ronda de contactos con todos los grupos políticos municipales, con el objetivo de lograr un acuerdo plenario en el que el Ayuntamiento se comprometa a luchar por la conservación de estas viviendas.

Además, reclaman la estabilización y regeneración definitiva de la playa de cara a evitar, no sólo la situación actual, sino también las previsibles consecuencias que la ampliación del puerto de Caleta de Vélez puede tener sobre esta parte del litoral.

El presidente de Bajamar asegura que esta situación está suponiendo una tortura psicológica sobre todo para los vecinos más mayores.