Pídele cuentas a Rubalcaba

ES asturiano y vigilante de seguridad y al igual que el minero protagonista de la película 'Pídele cuentas al rey', recorrerá a pie casi 600 kilómetros para pedirle, no al monarca sino al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que se cumpla la ley y la Constitución. Lo hará encapuchado, pues prefiere no revelar su identidad para evitar represalias, y llevará su placa de vigilante con la que pretende representar a todos los trabajadores de la seguridad privada. El objetivo: denunciar la precariedad, los bajos salarios y el intrusismo que vive el sector. Su marcha a pie comienza hoy desde Málaga. Por delante tiene 580 kilómetros hasta llegar a Madrid el próximo día 26.

J., que es la inicial de su nombre de pila, prefiere identificarse como 'Sobezno' el apodo por el que es conocido en el chat de la web vigilantesdeseguridad.com, donde nació la idea de esta marcha hace casi cinco meses. 'Sobezno', de 40 años, afincado en Tenerife y vigilante de seguridad desde hace ocho, no se lo pensó dos veces: «Me ofrecí voluntario y mi mujer me dijo que estaba como una cabra, pero me apoya. Lo hago porque pienso que nos va a beneficiar a todos los que estamos en esto y que es una forma de que la gente se entere de qué es lo que ocurre con las personas que trabajamos en la seguridad privada».

Y lo que ocurre, según 'Sobezno', es que, entre otras cosas, los salarios oscilan entre los 850 y 950 euros mensuales; las jornadas, muchas veces nocturnas, son interminables; las horas extras se pagan a 7 euros, y se contrata a personas sin preparación ni capacitación. En definitiva, una actividad laboral precarizada que acaba pasando factura al trabajador de este sector en su salud y en su vida familiar, pues muy a menudo es víctima de depresiones, estrés y sufre un alto índice de divorcios.

Mochila, bocatas y tienda de campaña. Nada de restaurantes ni de hoteles para descansar del agotamiento que le producirán sin duda los 30 kilómetros que como media deberá recorrer 'Sobezno' todos los días para llegar a la capital del país. «Esto lo pago yo de mi bolsillo y lo hago en mis días de vacaciones. Y es así porque no quiero que nadie me eche en cara nada ni se me acuse de que voy pagado por este o por aquel».

Detrás de la iniciativa no existen siglas sindicales (aunque cuenta con el apoyo de los sindicatos y de la Asociación de Vigilantes de Seguridad (AVSE), sólo las ganas de 'sobezno' y de los muchos compañeros que le acompañarán en su gran caminata a Madrid en sus justas reivindicaciones.

Ministerio del Interior

Tras salir de Málaga, el vigilante de seguridad, caminará hasta Granada y continuará por Jaén, Ciudad Real y Toledo hasta completar el recorrido en Madrid. Allí, tras veinte días de marcha, vigilantes de seguridad de todo el país le acompañarán en una manifestación hasta la sede del Ministerio del Interior, donde pretende entrevistarse con Alfredo Pérez Rubalcaba, a quien pedirá que se aplique la Ley de Seguridad Privada, que acabe con el intrusismo y sancione a las empresas que mantienen en condiciones precarias a sus trabajadores.

En Málaga trabajan alrededor de 5.000 de los 85.000 vigilantes de seguridad de todo el país. Además, en la provincia unas 2.500 personas están empleadas en la seguridad privada sin tener la preparación ni el título correspondiente y a las que ni siquiera se les exigen sus antecedentes penales.